Los niveles de contaminación de Pekín batieron un récord este martes, tan sólo 73 días antes de los Juegos Olímpicos, que arrancarán el 8 de agosto, y las autoridades advirtieron a los ciudadanos con problemas respiratorios de que no salieran a la calle. China asegura haber gastado 16.000 millones de dólares durante la última década para mejorar la calidad ambiental implantando medidas como alejar fábricas contaminantes de la capital o imponer tasas para los coches.