"Llegaron a las dos de la mañana y prendieron fuego a la ciudad". El caos producido tras el ataque dispersó a su familia. Corrió sin dirección fija junto a sus diez hijos. Algunos de sus familiares se perdieron, pero debía continuar. A día de hoy desconoce el paradero de los parientes que ya no estaban cuando miró hacia atrás. “Ellos tampoco sabrán que estoy viva. Quizá piensen que estoy muerta”
#1 Es la realidad. Vivimos en una burbuja de bienestar y comodidad y nos olvidamos del día a día de "otros" que si tienen que luchar por la supervivencia.
Comentarios
Sus 10 hijos lol
Que vergüenza de Mundo!
#1 Es la realidad. Vivimos en una burbuja de bienestar y comodidad y nos olvidamos del día a día de "otros" que si tienen que luchar por la supervivencia.