“El proyecto de presupuestos para 2012 presentado a finales del pasado mes de marzo resultó tener un carácter limitado, como si se tratara de los presupuestos correspondientes a un ejercicio normal. El mismo retraso en presentarlos había hecho esperar que se diese a luz un texto más ambicioso y acabado. De ahí la decepción. El trámite parlamentario no ha modificado un ápice