Hace unos días en tertulia con varios amigos, estuvimos comentando un discutido artículo, que pudimos leer este verano, en una revista mensual murciana de sociedad y política. El artículo en cuestión consistía en una severa crítica gastronómica a un restaurante recientemente inaugurado en La Manga del Mar Menor donde textualmente nuestro “Anton Ego” murciano escribía lo siguiente:
Comentarios
Spam @rickblaine