Paquito siempre fue un buen niño, algo distraído y ensimismado pero dulce y bueno. Una de las cosas que más satisfacción le producían, además de hablar con el niño Jesús, era pasar horas y horas jugando con aquellos recortables que simulaban ser trajes....
Comentarios
Juas. Eternamente inocente. Jajajajajaja.
Y honrado...