Hace 14 años | Por furigana a carlaantonelli.com
Publicado hace 14 años por furigana a carlaantonelli.com

Tan creyente era la vecina de Alberto que, a su muerte, dejó en herencia su piso de la madrileña calle La Paloma al mismísimo Papa Juan Pablo II. Era el año 93 y en España aún no existían ni las leyes de parejas de hecho.

Comentarios

f

efectivamente, dormiré igual de tranquilo que si no conociera esta noticia, pero es una noticia curiosa.

tocameroque

Totalmente irrelevante...por que además no fue el Papa sino la Iglesia a la aceptación de la herencia.