Aunque ha conseguido arrancarme alguna sonrisa en algún momento y una carcajada (solo ha sido una, la he contado) la película no me ha acabado de gustar. Tengo que admitir que Jim Carrey es un actor que me cuesta mucho. Se pone con sus caras y esos gags que debe improvisar el por que le vienen así… y a mi pues me saca de la historia, y no me hace reír. Aparte de eso la película es flojilla. El argumento o el planteamiento engancha. Estaba basada en la vida real de Steven Russell. El cual fue encarcelado por cometer varias estafas.
Comentarios
Después de la crítica que hizo de la balada de la trompeta, como que no vuelvo a leer otra crítica suya.