Hace 12 años | Por pacofdez77 a lavozdeasturias.es
Publicado hace 12 años por pacofdez77 a lavozdeasturias.es

El encierro de 36 sindicalistas marcó un antes y un después en la minería asturiana. Cuando ese puñado de sindicalistas se encerró en el pozo mierense era porque no había otra salida. Había que doblar el brazo del Gobierno que defendía cierre de pozos y despidos masivos. Finalmente, tras 12 días, los mineros pusieron fin a su protesta tras lograr voltear los planes de la reconversión minera en Hunosa. Para la mayoría, el encierro en Barredo es ya un hito en la historia del sindicalismo minero asturiano.