La posibilidad de que los ciudadanos de Inca puedan decidir mediante un referendo si el Ayuntamiento privatiza o no el servicio público de agua potable se esfuma. Si el pasado viernes, el alcalde Rafel Torres (PP) había aceptado la propuesta de Més per Inca de convocar una consulta popular sobre la polémica privatización, ayer esta posibilidad se enfrió totalmente después de comprobar que la larga tramitación que implicaría la convocatoria del referendo podría dejar sin fondos europeos a la reivindicada reforma del Teatre Principal.
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Preguntar a la gente? para que? montemos un teatro que se distraigan...