Divulgar el conocimiento científico no es una tarea sencilla. De hecho, si lo que se busca es asegurar la calidad de la divulgación, el trabajo de dar a conocer la ciencia está cargado de toda una serie de consideraciones: cómo traducir contenidos complejos, cómo no subestimar al público, cómo ayudarlo a que participe de manera activa en el hecho de la ciencia, cómo no perder de vista que el conocimiento es un bien público y debe ser defendido como tal. En divulgación, como en tantas otras actividades, la forma hace al contenido.
Comentarios
Pues ya podían tomar nota los del Muy y el Quo
En general, lo cambiaría por «Lo primero que debe hacer un experto es confiar en la inteligencia del interlocutor». La gente puede ser ignorante (falta de conocimientos) no idiota.