Hace 12 años | Por Tanatos a revistaenie.clarin.com
Publicado hace 12 años por Tanatos a revistaenie.clarin.com

Los ladrones usan dinamita y hasta motoniveladoras para ingresar en las cámaras más profundas –y anteojos de visión nocturna y bombonas de oxígeno para inspeccionarlas. Los objetos que se llevan suelen ser vendidos en cuestión de días a comerciantes internacionales. El robo de tumbas es un problema global que existe desde hace siglos. Sin embargo, la magnitud del patrimonio chino –con miles de sitios históricos, muchos de ellos en lugares alejados- representa un desafío particular.