Probablemente, muchos de los que iban en el vagón, quienes seguramente se dirigían a sus casas o a sus puestos de trabajo, no se esperaban encontrar de camino con una declaración de amor en directo, con banda sonora incluida. Adam King se lanzó de lleno a demostrar su amor a Lucy Rogers, su novia desde hacía seis años, delante de los viajeros de un tren en Londres