Para mejorar la comprensión que tenemos de nuestro universo los científicos están creando herramientas cada vez más complejas. Los proyectos realmente grandes requieren décadas de compromiso por parte de varios países. (...) Para este ránking se han considerado 4 criterios objetivos: costes de construcción, costes operativos, cantidad de personal y tamaño físico. A esto se han añadido 3 criterios subjetivos: la utilidad científica, la utilidad para el ciudadano medio y, por último, la capacidad de asombro que suscita.