Un amplio grupo de hasta 30.000 jóvenes fueron alistados por parte del bando republicano de la mano de Manuel Azaña para combatir en los frentes finales de Cataluña en abril de 1938. Su participación fue de menos a más durante los dos últimos años del conflicto civil.
Un tio mio fue de esa quitna. Y me contó al final de su vida, porque nunca quiso hablar, que nada más llegar le dieron un fusil sin balas y lo pusieron de vigia.
Comentarios
Un tio mio fue de esa quitna. Y me contó al final de su vida, porque nunca quiso hablar, que nada más llegar le dieron un fusil sin balas y lo pusieron de vigia.
mi abuelo fué uno de ellos... nunca le pregunté por la guerra, ahora me arrepiento.