La meticulosidad de Rafael copiando detalles era tal que aumentaba la imagen de los billetes 1.200 veces para retocarlos al milímetro. Si los falsificadores habitualmente se conforman con una sola plancha, él usaba nueve distintas en sus impecables reproducciones.
Comentarios
Para que luego digan Bellas artes no tiene salidas
#1 Y encima le bajan el IVA