Arenas finas, aguas cristalinas, piscinas naturales de agua tibia y acantilados a la vera del mar. Pipa, el pueblito del noroeste brasileño ofrece diez kilómetros de exóticas playas de arena blanca para nadar, pasar un romántico momento en pareja o, simplemente, contemplar la naturaleza y descansar.
Comentarios
spam pasandolo pipa