El fotógrafo Ben Heine parece haberse propuesto demostrar que no es necesario disponer de una buena fotografía para acabar teniendo una buena fotografía. O al menos, llamativa. Mediante el retoque fotográfico consigue modificar tanto sus fotografías que al resultado final quizás haya que llamarlo Arte Digital en detrimento de la Fotografía.
Odio con toda mi alma la palabra retoque. Yo soy fotógrafo y no "retoco", yo proceso. Lo que antiguamente se hacía entre líquidos y cubetas hoy se hace digitalmente, pero es exactamente el mismo procedimiento.
Como dice Mellado, retocan los maquilladores, no los fotógrafos. Otra cosa distinta son los fotomontajes, pero no el post-procesado fotográfico, algo imprescindible en fotografía.
#4 Hombre, normalmente se suele postprocesar para embellecer. No tenemos tanto en cuenta (al menos yo, hablo sólo por mí) la realidad que vimos al disparar cuando estamos procesando una fotografía. La dejamos como más bella la vemos en ese momento, porque quizás ni recordemos exactamente como era el momento exacto y no intentamos imitarlo.
Comentarios
Odio con toda mi alma la palabra retoque. Yo soy fotógrafo y no "retoco", yo proceso. Lo que antiguamente se hacía entre líquidos y cubetas hoy se hace digitalmente, pero es exactamente el mismo procedimiento.
Como dice Mellado, retocan los maquilladores, no los fotógrafos. Otra cosa distinta son los fotomontajes, pero no el post-procesado fotográfico, algo imprescindible en fotografía.
#1 Que más dará...
#1 Pues ahí está el debate, en que punto el postprocesado de la imagen pasa de ser algo "de trámite" para convertirse en Arte Digital o fotomontaje.
#3 Yo opino que está en el momento exacto en que falseas la realidad, no cuando tratas de acercarte lo más posible a la propia visión del ojo humano.
#4 Hombre, normalmente se suele postprocesar para embellecer. No tenemos tanto en cuenta (al menos yo, hablo sólo por mí) la realidad que vimos al disparar cuando estamos procesando una fotografía. La dejamos como más bella la vemos en ese momento, porque quizás ni recordemos exactamente como era el momento exacto y no intentamos imitarlo.