Hace 14 años | Por niñadelastorme... a elpais.com
Publicado hace 14 años por niñadelastormentas a elpais.com

El Departamento de Salud de la Generalitat parece tener cada día más claro que una aguja contaminada, en contacto con el anticoagulante heparina, pudo propagar el virus de la hepatitis C a siete pacientes sometidos a diálisis en un centro concertado en Tarragona. La clínica, gestionada por la multinacional alemana Fresenius, incumplía los protocolos de utilización de la heparina, cuya ficha técnica obliga a utilizar envases monodosis individuales cuando se inyecta a cada paciente. El centro, usaba frascos multidosis, mucho más baratos.