) se declaró culpable y anunció su renuncia, pero sigue en el cargo y busca retirar su declaración. La ACLU, que apoya su caso, afirma que las personas que tienen sexo en baños públicos esperan privacidad, y que es imposible probar que el senador buscara alguna actividad que sería notada fuera de la cabina. Visto en http://towleroad.com