Publicado hace 14 años por mezvan a cesartomelopez.blogspot.com

Cuando el planeta Tierra estaba terminando de enfriarse después de su formación, el Sol era joven y débil. Tan débil que no emitía energía suficiente como para evitar que los recién formados océanos terrestres se congelasen. Pero el hecho es que no se congelaron. Esto es lo que se conoce como la paradoja del sol débil, paradoja que no ha tenido hasta ahora una solución satisfactoria. Científicos de Tokio y de Copenhague, presentan una solución a la paradoja basada en el efecto invernadero provocado por un gas volcánico, el sulfuro de carbonilo