Hace 12 años | Por viudadehombre a culturamas.es
Publicado hace 12 años por viudadehombre a culturamas.es

La brillantez no debe confundirse con la genialidad. Los genios abren caminos donde siquiera se intuye su posibilidad. Además, siempre perseveran en su empeño, pese a los agoreros que predicen su fracaso. Son, por lo tanto, tan escasos como los ornitorrincos y merecen los mismos cuidados. Si un hombre de nuestros tiempos merece tan alto calificativo es Steve Jobs.