Un concesionario de automóviles, denunció que unas obras del metro, que duraron desde marzo de 2001 hasta diciembre de 2002, impidieron el acceso normal a la exposición de los vehículos y al taller de reparaciones. Por ello, reclamó las pérdidas a Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) por lo que había dejado de vender en este periodo, por la no realización del plan de actuación comercial, la renta del local que debió pagar, que fue infrautilizado durante este periodo, y otros gastos.
Comentarios
Pero si joden al del quiosco ya puede ir a reclamar a casa dios...Lo primero por que no se puede pagar unos abogados y peritos chulos como un concesionario millonario... Qué mundo de mierda...
#1 pero un sentencia del supremo crea jurisprudencia lo que puede ayudar en otros casos.
#2 pero un quiosquero en la misma situación jamás crea jurisprudencia, le echan a la mierda con su abogado de oficio... Y si no le ponen luego juicio y se libra de tener que pagar él encima por acusar en falso o cosas así y no le embargan el quiosco tiene suerte...