Publicado hace 11 años por AbusosPatronales a economia.elpais.com

Una de las mayores siderurgias de Europa detiene su planta de Taranto en protesta por el arresto de sus directivos: acusados de sobornar a técnicos y políticos para evitar los controles ambientales que responsabilizan a la planta —con una producción de 28.000 toneladas de acero al año— de los vertidos tóxicos que causan enfermedades y muertes en la zona. Tras el arresto de siete directivos, la siderurgia ha enviado a casa a los 5.000 empleados de Taranto y amenaza con hacer lo mismo con otros 12.000 en toda Italia.