Publicado hace 17 años por registr01 a diarioimpresentable.blogspot.com

Un magnífico texto de un impresentable: El chaval se había comprado un Seat León a plazos. Lo importante era el número de caballos y tunearlo lo antes posible. El chaval se había comprado un amplificador tan grande como un barril de cerveza para ponerlo en el maletero. Lo importante era el número de decibelios. Que temblaran los cristales de la gente en las madrugadas de otoño....