La opinión pública no sale de su asombro ante las complejidades técnicas que permiten a los tribunales aplicar diferentes varas de medir. Los ciudadanos contemplan sin comprender la pasmosa facilidad con la que Javier de la Rosa, varias veces condenado, y otros cinco procesados pueden llegar a un pacto de penas a la baja con el fiscal y las acusaciones particulares a cambio de reconocer la apropiación indebida de 70 millones de euros –caso Grand Tibidabo– después de 13 años de trámites procesales. Y, al mismo tiempo, algunos conductores(...)
Comentarios
Yo preferiría que el titular hubiera sido "unas leyes desconcertantes", pero ya se comprende el sentido.
A estos que roban deberían obligarles a devolver hasta la camisa, lo que han robado, más las ganacias que han tenido especulando con ese dinero.