Creativa, auténtica, casera y sana. La cocina catalana, estandarte de la dieta mediterránea con sus calçots, sus escalibadas y sanfainas, es una de las mejores razones para organizar un viaje gastronómico a Barcelona. Cuna de los grandes chefs del país, Cataluña es un destino perfecto para disfrutar de una ruta culinaria de alto nivel y a buen precio.