Hay una imagen icónica que sirve para definir más de cuarenta años de historia: un joven pívot, con el número 15 a la espalda, rompe el tablero tras recibir el balón, girarse y superar con su salto el tapón de Alfonso del Corral. Esa acción de Arvydas Sabonis, apenas 20 años recién cumplidos, en un encuentro entre la selección de la URSS y el Real Madrid provocó que ese partido tuviera que suspenderse definitivamente cuando faltaban 2:08 minutos para el final y los soviéticos vencían por catorce puntos (92-78)
Comentarios
#1 Es que ya le vale al del artículo, empezar así y no poner el fragmento de video en cuestión. Yo lo vi en directo, espectacular.
El típico torneo que servía para financiar con dinero público a un equipo concreto, solo a uno entre todos los que había.