Hace 3 años | Por gonas a elmundo.es
Publicado hace 3 años por gonas a elmundo.es

A las ocho de la mañana, en la puerta de acceso al Teatro Real no había público. Aquellas colas de entonces, aquel entonces del año pasado, y del anterior, y del otro, no estaban. Y, por tanto, tampoco las pelucas, los trajes de botones ni la mamarrachada general de los atavíos de chirigota. Nada. Los convocados de prensa, parecíamos miembros de un país serio que no se deja arrastrar por oleadas de fantasía.

Comentarios

parrita710

¿Le molesta al anormal de El Mundo que la gente se disfrace? Debe ser duro ver que la gente hace el payaso un día mientras tu tienes que hacerlo todos los días del año para ganarte una miseria escribiendo basura.

m

#1 hombre, un poquito de vergüenza ajena si que da el espectáculo.

pero oyes, cada cual a lo que le guste

ataülf

#2 de ahí a tildar de mamarrachada los atavíos chirigoteros...

m

#3 a ver hay de todo. Han habido años que, de ser alguno de esos familiar mio, le retiraba la palabra.

m

#4 pues eso, vergüenza ajena....

DrToxic

#2 ¿Un poquito? Madre mía.

Haces recuento de neuronas en ese teatro ese día y las únicas que sacas están sobre el escenario.