Las matemáticas, y un poquito de investigación, se bastan para contestar a esta pregunta. Los arqueólogos han establecido que el peso medio de un varón judío en tiempos de Jesús estaba en torno a los 50 kilogramos, para una estatura media aproximada de 1,55 metros. Teniendo en cuenta que una hostia viene a pesar 0,22 gramos, se podrían sacar 227.272,73 hostias de nuestro Jesucristo hipotético. Sin olvidar que, antes, tenemos que restarle la sangre, que va aparte.
Comentarios
Con una bien dada suele ser suficiente para todo.
(Pequeño homenaje a Bud Spencer)
#1 dar hostias es buen ejercicio fisico y mental y lo mejor es buscarse un buen sparring imaginario
Lo importante es adaptar el mensaje a la sociedad.
Me encanta, no obstante, debo señalar que hay un error de concepto, un error «teológico» en el texto. Según la teología católica, la presencia de Jesús en la forma no es «metafórica», como dice el artículo, sino real, aunque no afecte a «los accidentes». Los accidentes son, según un concepto adaptado de Aristóteles, todo lo que percibimos, pero la esencia de la Sagrada Forma es real y verdaderamente la carne de Cristo (no una metáfora). Muy loco, pero los católicos han de comulgar con ello.
#6 cierto. Artículo plagado de errores. Obvia la transubstanciación de la forma. No me había percatado del 'metafóricamente'
No comulgo con esto.
Gracias por este post, es una pregunta que me intrigaba desde hace tiempo a la que era muy necesario responder
¿Pero hay que deshidratarlo primero o no?
Cambia mucho la cosa.
De todas formas una hostia es un especie de Jesucristo homeopático. Vamos, de mentira.
Errónea. Se debe ir a misa y comulgar todos los días. Lo de la misa dominical es el mínimo a cumplir. Un buen católico debe terminarse su Jesucristo enterito unos 620 años después de su primera comunión.
Si Jesús es amor, y me como a Jesús...¿luego quiero ver en el cine sólo comedias románticas?