Lo que se ve por la tele, sin embargo, se toma ciertas licencias de ficción. Los compradores que solicitan participar en el programa deben acudir con una casa antigua y remodelable ya localizada, de modo que lo de ir a ver una carísima, el rol de Drew como agente inmobiliario y las dudas de los compradores sobre si meterse o no en la uberreforma son una pantomima. No hay suceso con el que no se pueda hacer un programa lucrativo. Brothers Take New Orleans (la reconstrucción benéfica de hogares de damnificados por el huracán Katrina)
Comentarios
Las pocas veces que he visto sus programas me queda clarísimo que está preparado. No voy a decir que es un amaño porque en realidad no engañan a nadie. Reforman una casa de una familia, y a su vez encuentran otra casa de la calidad que tendrá la que está reformando y los propietarios tienen que decidir si se quedan la nueva o la reformada.
Está claro que la casa la tienen reformada y apalabrada, o bloqueada su venta con una señal y que están de acuerdo en utilizarla para una operación inmobiliaria. Ya decida la persona mantener la antigua reformada o irse a la nueva es algo ya conocido de antemano.