Entre sus paredes descansan más de 500 años de historia. Construido para dar cobijo a los creyentes que realizaban el camino, hoy parador que proporciona tranquilidad y sosiego a los turistas. Testigo del bautizo de Rosalía, así como de la elaboración del Estatuto de 1981 o la cumbre hispano-alemana protagonizada por Felipe González y Helmut Kohl.
Comentarios
Yo he estado en ese hostal y es una verdadera ruina, sucio y con bichos. Las fotos engañan.