Publicado hace 3 años por doctoragridulce a elconfidencial.com

"Los regalos no se dice lo que han costado". Eso espetó el difunto Miguel Blesa, gerifalte, amo y señor de la antigua Caja Madrid. Corría el 2004 y este banquero, una de las caras más representativas de la década del ahora denostado 'milagro español', quiso tener un detalle con Madrid. Un obsequio modesto: una gran obra de Santiago Calatrava. Aunque cueste creerlo, este icono 'pop' de alcaldes y presidentes autonómicos de toda la geografía patria, aún no había hecho pie, arquitectónicamente hablando, en la capital a esas alturas.

Comentarios

D

Para chusco llamar "free tour" a algo que cuesta 10 euros


lol

Pointman

No me acordaba que el puñetero obelisco había costado 5 millones. Pero que unicornios...

e

Que casualidad, ayer le vi en la Castellana vestido con un mono azul y casco blanco acompañado de un grupo de personas dando explicaciones del edificio del BBVA.