Existe una carretera que partiendo de ningún sitio, termina en medio de ninguna parte. Tiene 666 kilómetros de largo y la única manera de salir de allí una vez has entrado es volver sobre tus propias huellas. Si te atreves a recorrerla, es muy probable que no te encuentres con nadie por el camino. En realidad, si por azar te cruzas con alguien es muy probable que desees no haberlo hecho. Y si tienes un problema mientras la recorres tus posibilidades de supervivencia, lamento decirlo, son más reducidas de lo que te gustaría escuchar.
Comentarios
Taiga nació siendo camino, pero siempre se sintió carretera. Respect
(Ya cierro yo al salir)
Que buenos siempre los repors de fronterasblog
#2 Sobre todo cuando son fusilados de otros sitios, como:
https://www.diariomotor.com/2009/12/08/trans-taiga-road-la-carretera-a-ninguna-parte/