Hablamos con Rafael Poch sobre el panorama geopolítico general y sobre el papel de Rusia y China, entre otras cuestiones. También hemos tratado el caso de Pablo González.
Este fragmento me ha parecido especialmente brillante ( a partir del 24:53):
Los EEUU no se hacen a la idea de que ellos puedan llegar a ser, no ya el nº1, si no el nº2. Ese es un tránsito muy complicado para los imperios, para las grandes naciones venidas a menos. Rusia misma, con su conducta en Ucrania, acusa esta patología. Con EEUU nos encontramos con un sujeto muy particular, un sujeto que nunca ha conocido la derrota, nunca, que nunca ha luchado en su propio territorio, la última vez fue la Guerra Civil, medio millón de muertos, pero de eso hace ya muchísimo tiempo y ni se acuerdan.
Pero una amenaza extranjera fuerte, o una lucha contra un ejército comparable en términos de amenaza militar, que si pierdes te pueden anular a ti, eso no lo han conocido nunca. Y eso te da una mentalidad de la guerra como si fuese un videojuego...la guerra es algo banal, ganas siempre, el adversario siempre se acaba rindiendo. Y esto es sumamente peligroso para el cambio de mentalidad.
Tú puedes ser una gran potencia en el mundo, o un primum inter pares en un universo de potencias iguales o en equilibrio y seguir teniendo una gran potencia, eso es una cosa que tú puedes administrar. ¿Es posible renunciar a ambiciones? Claro que es posible...históricamente lo hemos visto en la URSS. La URSS se retiró de todo su espacio imperial sin pedir nada a cambio, prácticamente.
La URSS sí que conoce la derrota y la invasión.
Chapeau por la gente que sabe explicar tan endemoniadamente bien las cosas.
Comentarios
#0 Este es el tipo de envíos por los que entro en MNM. Gracias.
Muy interesante 🍻 🍻
Este fragmento me ha parecido especialmente brillante ( a partir del 24:53):
Los EEUU no se hacen a la idea de que ellos puedan llegar a ser, no ya el nº1, si no el nº2. Ese es un tránsito muy complicado para los imperios, para las grandes naciones venidas a menos. Rusia misma, con su conducta en Ucrania, acusa esta patología. Con EEUU nos encontramos con un sujeto muy particular, un sujeto que nunca ha conocido la derrota, nunca, que nunca ha luchado en su propio territorio, la última vez fue la Guerra Civil, medio millón de muertos, pero de eso hace ya muchísimo tiempo y ni se acuerdan.
Pero una amenaza extranjera fuerte, o una lucha contra un ejército comparable en términos de amenaza militar, que si pierdes te pueden anular a ti, eso no lo han conocido nunca. Y eso te da una mentalidad de la guerra como si fuese un videojuego...la guerra es algo banal, ganas siempre, el adversario siempre se acaba rindiendo. Y esto es sumamente peligroso para el cambio de mentalidad.
Tú puedes ser una gran potencia en el mundo, o un primum inter pares en un universo de potencias iguales o en equilibrio y seguir teniendo una gran potencia, eso es una cosa que tú puedes administrar. ¿Es posible renunciar a ambiciones? Claro que es posible...históricamente lo hemos visto en la URSS. La URSS se retiró de todo su espacio imperial sin pedir nada a cambio, prácticamente.
La URSS sí que conoce la derrota y la invasión.
Chapeau por la gente que sabe explicar tan endemoniadamente bien las cosas.