Publicado hace 2 años por Amonamantangorri a actualidad.rt.com

¿Estamos afirmando que la retórica contra el globalismo de la ultraderecha actual es hija directa del movimiento antiglobalización? Ni mucho menos. Todo es producto de su época y el altermundismo fue la respuesta que pudo darse a la etapa triunfante neoliberal, tras las ruinas humeantes del Muro de Berlín y la tercera vía socioliberal. Lo cual no implica que se abrieran de forma inconsciente unas puertas que la ultraderecha ha sabido aprovechar 20 años después: la rebeldía abstracta, el sujeto político como multitud indefinida...

Comentarios

Amonamantangorri

La crítica al globalismo de los ultras es tan sólo una coartada, una conveniente máscara para que las opciones más reaccionarias pasen por rebeldes. El populismo de ultraderecha dice atacar a "las élites", que nunca son las económicas, sino un difuso enemigo compuesto por burócratas. También utiliza la palabra soberanía, como nacionalismo excluyente, sin concretar nunca cuáles son las medidas concretas frente al sistema financiero internacional. Y por supuesto se apunta al carro del caos dónde y cuándo toque: desde los antivacunas hasta los preparacionistas del colapso. La ultraderecha es capaz de hablar "del gran apagón" y en el mismo momento atribuir la idea de cambio climático a una conspiración china. O enarbolar la teoría de la "la gran sustitución" pero apostar por una economía de explotación a la mano de obra inmigrante. También hablar de un "lobby gay" que destruye las familias y, a la vez, presentar a candidatas abiertamente homosexuales como reto a los integristas islámicos. Si hay un movimiento de multitudes inconexas, atemorizadas y enfadadas esa es la ultraderecha, la perfecta liquidez posmoderna al servicio de las ideas más retrógradas.

dick_laurence

#1 Así es como dices. Un poco relacionado con lo que escribes y lo que el artículo trata, hace pocos días escribí aquí en Menéame un articulillo. Te dejo el enlace, aunque sé que esto de autocitarse no es muy elegante, por si te apeteciera echar el ratoillo leyendo (así además nos ahorramos un ladrillo de comentario):

Agorainflación. Una visión de la actuación del BCE

A

#1 Tener aglutinados y bajo tu control a los más colgados de la sociedad te asegura el poder, sobre todo en tiempos convulsos.

D

Esto no es nada nuevo. Una parte de la derecha, la derecha conservadora en su versión moderada y fascista en su versión radical, siempre ha defendido fronteras fuertes y cierto aislacionismo. Ahí está por ejemplo la autarquía defendida por los fascismos de los años 30 o por el Franquismo en los años 40-50 (aunque este segundo por necesidad). En este aspecto, conservadores y fascistas coincidieron con la URSS y sus países satélite el Pacto de Varsovia, que también buscaron aislarse. Hoy en día Corea del Norte es un buen ejemplo de esto. Podríamos remontarnos incluso a la era moderna y el mercantilismo, donde se perseguía que cada reino-imperio fuese una suerte de isla económica.

Nova6K0

Sí la izquierda se separó en dos, la que sigue (seguimos) luchando por la guerra de clases. Y la que en su mundo de la piruleta se cree que, por ejemplo, Oprah Winfrey por ser mujer y negra tiene, a pesar de ser una de las mujeres más ricas de EE.UU, menos derechos que otros hombres y mujeres que son blancos y pobres, o no ricos.

Saludos.