"Abandono del puesto de trabajo sin causa justificada", "realizar trabajos particulares en el horario laboral" o "el uso inadecuado del vehículo de empresa". Son los motivos que ha esgrimido la Diputación de Valencia para echar a uno de sus trabajadores, que formaba parte primero de Imelsa, luego Divalterra, la empresa pública de la corporación, como "contratado laboral fijo adscrito al centro de Turismo" y tras su disolución era parte de la plantilla de la corporación.
Comentarios
Un pepero creyendo que las instituciones son suyas. Me pinchas y no sangro