"Crsispación y polarización no significan lo mismo, pero vienen a decir algo muy parecido: que estamos molestando a ciertas personas importantes –y de derechas– con nuestras cosas y eso no puede ser. Por ejemplo, no hubo crispación ni polarización cuando bajo el Gobierno de M. Rajoy se alcanzaron máximos terroríficos en las tasas de desempleo o de pobreza, porque fracturar a la sociedad y dividirla entre los que consiguen comer y los que tienen que rebuscar sobras en la basura no es ni la cuarta parte de problemático..."
Comentarios
Está claro, debería haber elegido como ministros a sus enemigos.
#1
No has leído ni la entradilla.
#2 he leído el artículo, eso si, después de comentar
El feminismo solo depende Irene Montero
el ministerio de fomento ya no existe?
#4 lo han cambiado por el de juventud