Hace 1 año | Por Bourée a lavozdeasturias.es
Publicado hace 1 año por Bourée a lavozdeasturias.es

Antes de Einstein, ya sabíamos a nuestra manera que el tiempo era relativo. El dolor o el aburrimiento lo hacen lento hasta la desesperación. Otras veces es el propio tiempo el que parece dilatarse y, aunque las cosas avanzan, avanzan dentro minutos y horas elásticos que se estiran sin pasar al momento siguiente. Creo que parte de la peculiaridad del verano y el calor es esa sensación. Aunque sabemos que sí habrá un mañana, se pierde la sensación de trascendencia. Es un acierto que la actividad política quede en funciones vegetativas (...)

Comentarios

koe

Pues diciendo que las corbatas no son para el verano...y poniendo el aire acondicionado por decreto a 27 grados...

Casualidades de las guerras culturales...

Lo de intervenir a las eléctricas para otro universo paralelo. Mejor hacer guiños a otro tipo de iniciativas ... En fin.