Hace 3 años | Por Papyrus a mundoobrero.es
Publicado hace 3 años por Papyrus a mundoobrero.es

Marcelino Camacho es, a diferencia de muchos de los rostros de la transición, una memoria incómoda. Marcelino no es solamente parte de la historia de nuestro país, sino memoria viva de una estrategia dirigida a la construcción de una cultura política autónoma de la clase trabajadora en España.

Comentarios

P

Los referentes históricos son los anclajes materiales de las ideas de cualquier proyecto político. Los conservadores lo tienen claro y de ahí sus constantes alusiones a Juan Pablo II, Churchill, Thatcher, Reagan y tantos otros que figuran en el campo de los hechos puros, no de las teoría puras. Sin ellos las ideas se convierten en quimeras.

yonky_numerotrece

M.Camacho ha sido de los pocos sindicalistas, junto con N.Redondo a los que le importaba realmente el bienestar social de los trabajadores; son (o deberían ser) un referente de una izquierda venida a menos.
Me gustaría saber que pensarían sobre la izquierda actual más preocupada por repartirse a los juezes, por subirse el sueldo, por el rosa y el azul......