Hace 3 meses | Por Dragstat a eltribuno.com
Publicado hace 3 meses por Dragstat a eltribuno.com

Si prestamos atención a lo escrito y dicho por el presidente, vemos que las ideas, los autores y las doctrinas que animan sus políticas se basan en las ideas de Hayek, Von Mises, Rothbard o Hans-Hermann Hoppe. Milei afirmó que las ideas de Hoppe "son el norte a seguir". Hoppe, autor del libro "Democracia: El dios que fracasó" critica al sistema democrático, afirma que la democracia es la causa del declive de la civilización. Afirma que es preferible un rey a un presidente. Ante todo, hay que deslegitimar la idea de la democracia.

Comentarios

Verdaderofalso

Si te toca un rey loco, borracho o retro drago te lo comes hasta que muera. Ejemplos hay a patadas

Dragstat

Artículo interesante que explica parte de la doctrina que sigue Milei y que explica muchas cosas:

"Contrasta la democracia con la monarquía, reivindicando a esta última; ratificando que la redistribución de la riqueza afecta la propiedad privada. También, que la democracia afecta en forma negativa sobre la propiedad, libertad y civilización; auspiciando como solución a la ley privada y la descentralización".

"Toda redistribución, con independencia del criterio en que esté basada, implica que se «toma» de los propietarios o productores originales y se «da» a quienes no son ni propietarios ni productores".

"Si se subsidia a ciertos individuos porque son pobres se creará más pobreza. Subsidiar a la gente porque está desempleada, aumentará el desempleo. Subsidiar a las madres solteras con los impuestos provocará que haya más madres solteras, más hijos «ilegítimos» y más divorcios".

B

#1 Quien ataca la democracia ataca la libertad de elegir, la libertad y el libre mercado. ¿Milei no iba de defensor de la libertad?

Hay dos tipos de enriquecimiento: el inmerecido e injusto, y el merecido y justo. El capitalismo es el enriquecimiento inmerecido e injusto: el capitalismo no defiende que la gente gane riqueza por sus méritos propios, el capitalismo defiende y legitima que la gente pueda ganar riqueza porque encuentre la manera de robársela a los demás, a través de métodos monopolistas extorsionadores.

Si no existiera el capitalismo, y por tanto la gente pudiera ser propietaria privada del capital y los ahorros que ha producido con su propio esfuerzo y mérito, la gente tendría ahorros para vivir sin trabajar, cuando llegase a la vejez, o cuando tuviese que cambiar de profesión y quedase desempleada durante cierto tiempo por dicho cambio de profesión, o cuando quedase inactiva por problemas de salud, o para poder legar negocios a sus hijos.

D

#4 la verdad es que sí las hay buenas. Y que son todas tiránicas? Que yo sepa, sin ir más lejos, España no es una tiranía, y eso que no es de las buenas.

De los gobiernos unipersonales solemos llamar monarquía al que vela por el bien común; al gobierno de pocos, pero de más de uno, aristocracia (bien porque gobiernan los mejores (áristoi) o bien porque lo hacen atendiendo a lo mejor (áriston) para la ciudad y para los que forman su comunidad); y cuando la mayoría gobierna mirando por el bien común, recibe el nombre común a todos los regímenes políticos: república (politeía) […].
Desviaciones de los citados son: la tiranía, de la monarquía, la oligarquía, de la aristocracia y la democracia, de la república. La tiranía, en efecto, es una monarquía orientada al interés del monarca, la oligarquía, al de los ricos y la demagogia, al interés de los pobres. Pero ninguna de ellas presta atención a lo que conviene a la comunidad
Política, III 7., 1279a-1279b


Esto es de regalo.

D

Una buena monarquía es mejor que una mala democracia. Una buena democracia es mejor que una mala monarquía.

La monarquía da estabilidad si está bien llevada.
La democracia eleva al humilde dandole la capacidad de decidir, aunque sea mínimamente, si no se corrompe al votante con una mala moral y una información sesgada.

Cada cosa tiene sus pros y sus contras. Lo importante es hacer el bien. Lo importante es no darle la vuelta a las virtudes haciendolas parecer porquería y vicios, y no darle la vuelta a la porquería y a los vicios haciéndolas parecer virtudes.

Mientras se habla de temas secundarios se deja de hablar de lo primerio, que está bien y qué está mal.

T

#2 El problema es que no hay monarquías buenas.
Todas las monarquías son tiranías cuya finaliad es la explotación del pueblo en su beneficio.
Encarnan como nadie el poder en su concepción más básica como la capacidad de conseguir que el otro se pliegue a nuestros deseos, incluso los más inconfesables.
Un poder perfecto en el que el sometido lo acepta de buen grado incluso solicitandolo pensando que fuera del sometimiento sólo cabe el infierno.