Hay un nuevo territorio en disputa en la cultura popular y la manera de ganarlo es descontextualizarlo de su origen, simplificarlo y despojarlo de sus características más transgresoras. Es sorprendente ver cómo la música pop puede acabar convertida en rehén de ciertos dirigentes políticos dispuestos a apropiarse de lo que sea con tal de darse la razón a sí mismos. En 2010, Johnny Marr y Morrissey tuvieron que pararle los pies a David Cameron, por aquel entonces primer ministro conservador británico.
Comentarios
#1 Ya lo veo, ya.
#3 Que se apropien del punk, tira. Pero que se apropien del Rol en vivo eso si que no!
#3 ¿ Qué es eso? ¿ Es en serio? No me digas que es un acto de partido…
#6 Disfruta de esta maravilla de lo rancio:
https://www.publico.es/tremending/2022/10/08/vox-convierte-su-acto-viva-22-en-un-carnaval-han-sacado-a-don-quijote-para-luchar-contra-los-aerogeneradores/amp/
#7
Ay Dios, no tenía que haberme metido. Qué triste. Lo más triste de todo es que incluso había gente.
#8 Bueno, facha aventura cada vez flojea más...
God save the queen, que bueno está el espid que entra por mi nariz!
No te cuento lo del tripi, que sería muy hippie!!
Me permito recomendarles cualquier tema de Eskorbuto, especialmente "mucha policía, poca diversión" , "maldito país, España" y, para que no se diga, "a la mierda el País Vasco"
Veo el nuevo lema de VOX: "no future!"
El 70% de los punkis eran pijos y el otro 30% restante eramos tropa, hay dejo el dato.
Que puedan tener cierto parecido con algunos Skinhead de la primera época antes de ser antifascistas ,tiene un pase por su carácter autoritario pero Punkis precisamente no los veo.
Ya me gustaría ver a mi un debate entre Evaristo y Abascal.
#4 Tendría un pase, pero a mí me gustaría más, por ver una laminación bestial, entre Julián y Pagascal
#4 Dos antivacunas...