Hace 2 años | Por pinaveta a agenciasinc.es
Publicado hace 2 años por pinaveta a agenciasinc.es

Trasladando el piano, el arpa y los instrumentos de percusión hacia el centro del escenario y llevando los clarinetes, trompetas y flautas a las orillas, más cerca de las rejillas por donde se renueva el aire, se puede reducir la concentración de aerosoles en los conciertos, junto a la siempre necesaria buena ventilación. Investigadores de la Universidad de Utah (EE UU) lo han comprobado con modelos computacionales.

Comentarios

D

como recolocarlos? pues el violinista de camarero, el trombonista de electricista, el flautista de programador de python...

Nova6K0

#6 lol lol lol Más bien, sí...

Saludos.

D

Los vientos mirando hacia atrás, supongo.

leporcine

#1 lol

D

#1 los vientos tambien suelen llevar aleaciones de cobre...

D

El problema es que la disposición de una orquesta es la que es por algo y no se puede cambiar por mis cojones morenos.

Amperobonus

Lo que no han analizado los autores es cómo impactan estos cambios en la acústica y la calidad del sonido para la audiencia. “Hemos intentado mantener la proximidad de los grupos de instrumentos, y pensamos que para una persona sentada en casa escuchando, la calidad del sonido no se verá afectada”

Pues nada, alteramos la acústica sin pensarlo y punto.

La gracia de los conciertos es la presencialidad de los mismos

D

¿Y sí, en lugar de soplar, aspiran?