La historia de Omri Goren, exempleado doméstico del ministro de Defensa de Israel, Benny Gantz, subraya cómo el factor humano pone a prueba la seguridad en internet. He de reconocer que en este cibermundo las historias que más me atraen son las humanas. Quiero decir con ello que a pesar de la atracción que ejercen sobre nuestra atención las historias que incluyen más términos extraños, siglas inescrutables o conceptos terriblemente complejos, el factor humano es desde mi punto de vista lo que marca la diferencia en múltiples ocasiones entre un…
Comentarios
Acabemos, pues, con los humanos, son sólo basura.
Vaya artículo! Que profundidad! Es coña.
Nada nuevo, siempre lo ha sido y siempre lo será