Cuando toda la ropa que vistamos esté conectada a internet y no haya paso, latido, sudoración, pestañeo ni segundo de sueño que no sea procesado y traducido, ¿quién se atreverá a llevar una camiseta que diga “Yo no soy un robot”? Nuestra realidad ha invertido la lógica de Blade Runner: somos nosotros, los humanos, quienes tenemos que demostrar constantemente que no somos seres artificiales.
Nos guste o no, poco a poco la IA va a controlar todo (en especial la forma de vender). Siempre será mucho más fácil usar una máquina para saber que hacer, que tener a personas pensando o trabajando.
Como detalle de esto, hace tiempo escuche que la idea de Amazon era mandarte las cosas antes de que supieras que las querías y tal como va la cosa, no lo veo raro en unos años.
Comentarios
Viva el neoludismo!
Todas estas noticias sobre los peligros de la IA me recuerdan una carta en la vanguardia de principios del siglo XX:
Los coches no deberían ir a velocidades superiores a los caballos, asustan a los niños y huelen mal.
Nos guste o no, poco a poco la IA va a controlar todo (en especial la forma de vender). Siempre será mucho más fácil usar una máquina para saber que hacer, que tener a personas pensando o trabajando.
Como detalle de esto, hace tiempo escuche que la idea de Amazon era mandarte las cosas antes de que supieras que las querías y tal como va la cosa, no lo veo raro en unos años.