La invitación no dejaba lugar a dudas: "Afternoon tea with President Aguirre". Pero la presidenta madrileña no acudió a la cita. Lo anunció uno de los organizadores con cierto disgusto pero con mucha flema. "La próxima vez", dijo sonriente, "invitaremos a un alemán. Esos nunca fallan". El evento se celebraba en el Carlton: el club conservador con más solera de Londres. Una institución fundada en 1832 y en cuyos salones todavía hoy se reúnen ministros y diputados 'tories'.
Comentarios
Qué raro. Con lo educada que es la lideresa.
Suerte tuvieron de que no los llamara hijoputas.
Ella es más castiza y prefiere el café.
'Para beber agua sucia a las 5 de la tarde no voy, vaya costumbre más rara, prefiero ir a Harrod's, aunque sea pobre de pedir algo habrá que cueste 2 euros.'
Podría haber dicho, no digo que lo dijera