Hasta hace muy poco era difícil imaginar la posibilidad de que un hijo agrediese a sus padres. Pero, desgraciadamente, ya no hay que imaginar nada. La Memoria de la Fiscalía General del Estado en la que se recogen los datos de 2011 lo ha vuelto a confirmar. El maltrato de menores ha experimentado un aumento alarmante en los últimos años. Concienciarnos de la gravedad de este asunto es prioritario, pero también lo es analizar cómo hemos llegado a esto. Sólo así podremos aspirar algún día a poner freno a esta situación.
Comentarios
No haber dado dos hostias a tiempo.
#1 Me ganaste por medio segundo, según veo...
#1 #2 Si, esa gran técnica de enseñar agrediendo. Luego nos sorprendemos de que hagan lo mismo.
#6 creo que #8 te lo ha explicado bien. Hay veces que los niños no consideran que las palabras sean límite suficiente para sus actos, así que hay que establecer una barrera digamos física. Hay que tener mucho cuidado con ello, también es cierto. Pero a veces es lo que queda.
#10 Entiendo que vivimos en un país en el que la bofetón y la colleja son métodos aceptados por la mayoría. Pero desde luego, cualquier tipo de agresión (y lo anteriormente mencionado lo es) sea física o verbal tiene consecuencias y no son buenas.
Es lo que queda, a mi me lo hicieron y no me pasó nada, todo el mundo lo hace, lo estaba pidiendo a gritos... son los argumentos de toda la vida para disculpar lo innecesario y nocivo.
http://www.bebesymas.com/ser-padres/por-que-pegar-a-los-ninos-es-un-mal-negocio-para-lo-ninos
#11 El problema es cuándo aplicarlo y hasta qué punto. Pero por sí mismo no me parece que esté fuera de lugar. Estoy seguro de que me sería difícil encontrar a alguien en mi entorno y alrededores a quien no le hayan calentado el culo alguna vez. Y ni mejor ni peor, hay de todo, siguiendo la típica campana de Gauss entre gente imbécil y no imbécil. Pero estoy seguro de que alguno habría sido sustancialmente más imbécil de no haberle enrojecido la piel en un momento dado. Segurísimo.
#1 , #2 . Una cosa es una agresión, y otra es una hostia a tiempo.
Las collejas de mi padre, dolieron más por orgullo que por el golpe en sí, que era insignificante. Y aprendí mucho de ellas.
#8 Absolutamente de acuerdo.
El maltrato no es necesario si, desde bien pequeños, se ponen los límites que se deben poner y se educa como padre, no como amigos. Un niño con límites y con consecuencias cuando hace algo mal crece emocionalmente sano.
#5 que dices!!! con lo que mola ser un padre güay!!! Es lo más!!
Cierto que te llevas un par de hostias de tu hijo de vez en cuando. Incluso vives para pagarle sus gilipolleces.
Pero que te quiten lo bailáo siendo güay...
No educarlos.
En contra de lo que creen muchos compañeros docentes, no está mal que los niños le den unas hostias de vez en cuando a sus padres. La mayoría de padres son unos seres despreciables y se lo merecen
"Javier Urra expuso que los niños agresores, en contra de lo que muchos creen, suelen tener padres formados, democráticos. Pero son “demasiado indulgentes, permisivos, les cuesta imponer normas, mantener castigos…". Ahí puede que radique alguno de los problemas, padres demasiado ocupados para mantener un castigo o tolerantes con esas pequeñas faltas de respeto, que de no corregirse a edad temprana a la larga se vuelven contra ellos y también contra los chicos. Si a un niño no se le ponen límites le estamos enseñando que todo vale y cuando salen a la vida se sienten distintos a otros chicos, con lo que se reunirán con otros como ellos, para no sentirse desplazados.
#12 La mayoría no , sí algunos; se debería primero educar a los padres, a veces los niños son reflejo de sus padres.
Estoy de acuerdo al 100% con #12. Los padres que son agredidos por sus hijos es porque se lo merecen.
Pero, ¿qué hacer si un día nuestro hijo nos agrede? ¿Debemos ponernos duros? Desgraciadamente, esa vía se agotó hace tiempo. Lo más eficaz será cambiar su entorno, sus amigos y hacerle empezar de nuevo.
Y hacerle un regalo también.
No ponerles bien los limites desde pequeños.
E intentar enseñar y que los hijos aprendan algo que los padres no practican ni dominan. (en cualquier asunto)
El tipico "haz lo que digo, no lo que hago".
Si los padres o al menos uno de ellos no respetan a las demas personas o entre ellos, como pretenden que les respeten sus hijos.
Los hijos aprenden principalmente de los padres y madres. Pero no de lo que les enseñan, sino de su ejemplo con las demas personas.
Y despues esta el ejemplo de violencia estructural de las instituciones.
Deshaucios.
Represion.
Puerilidad en los representantes politicos (la tipica reaccion y tu mas, o y tu tambien)
Empresas con los clientes.
Empresas entre ellas (competencia salvaje es violenta)
Falta de consenso (los politicos son el peor ejemplo en consenso, si un partido tiene mayoria se la suda el resto)
...
Carecemos de una reserva suficiente de bofetadas a tiempo...
Siguiente pregunta.
¿Así cómo vamos afrontar un problema tan complejo, cuya solución requiere coordinar tantos estamentos?
Uf, complejísimo. Tan complejo que se requieren estudios profundísimos para enfocarlo y tratarlo; por eso cuando hace unas décadas había tanto analfabetismo en España y la educación universitaria era para unos pocos, proliferaban por doquier los hijos que pegaban a sus padres.
Segun mi opinión, el problema es que se les educa con la idea de que son "los reyes de la casa". Y el rey, cuando crece, quieres cosas y no acepta un "No" por respuesta a sus caprichos. Luego le surge la frustración y la ira.
Enseñarles desde pequeños que no mandan, que no siempre se puede tener todo lo que se desea(y menos si es sin esfuerzo) y que el mundo hay 7.000 millones que tienen los mismos derechos que el. Estas cosas creo que ayudarían a criar seres humanos en lugar de gilipollas megalómanos y engreídos.
Normal con la libertad que tienen ahora como para encima decirles algo te denuncian y a la cárcel.