[c&p] Tardé muchos segundos en darme cuenta de lo que estaba sucediendo. Estábamos de suerte esta tarde. De mucha suerte. Las ballenas rondaban las barcazas, y de repente una enorme se asomó a ver a esos humanos de la panga. Me resistía a acariciarla, no tanto por miedo sino por respeto. “Pero tócala, les gusta, les gustamos los humanos”, me dijo Lorena. Estiré la mano y sentí esa piel rugosa como de lengua de gato. La ballena gris bufó pero se quedó ahí, mirándonos y disfrutando de las caricias durante cinco minutos a los que...
Comentarios
2º parte: http://ngenespanol.com/2009/03/19/cinco-minutos-que-no-tienen-precio-parte-2-blog/
Increibles imagenes!! Has acertado con el titulo!
Me gustaria menear esta noticia 100 veces.
Gracias, gracias, gracias!!!
Estas noticias me tocan el alma.