1: Tómese un insecto alado, preferiblemente de vuelo asíncrono, y que pueda llevar cargas 2: Implántense en el pronoto del insecto un sistema compuesto por un estimulador neuronal, estimuladores musculares, un microcontrolador por radio y una microbatería que suministra la energía 3: Úsense pulsos eléctricos para estimular el cerebro y los músculos de las alas y voilà, ya tenemos un ciberinsecto o entomocyborg cuyo vuelo podemos controlar a voluntad.
Comentarios
#0 Dupe: El vuelo a control remoto del escarabajo cyborg del Pentágono (ING)
El vuelo a control remoto del escarabajo cyborg de...
scienceblogs.comEl problema es el precio del mando a distancia...
Joder, ¡Qué cruel!
hay gente con mucho tiempo libre
La ostia que cosas, ya me estan entrando ganas de hacerme uno