C&P "Hasta 400 teléfonos móviles han sido incautados en las cárceles inglesas en el último año. Esa es la razón de que hayan decidido instalar este antiestético asiento llamado BOSS II a pesar de que cada uno cuesta 9000€. Gracias a sus tres sensores puede detectar objetos metálicos tan pequeños como un alfiler o una tarjeta SIM en el interior de un individuo."
Comentarios
#1 Y el inhibidor como distingue cuando llama un protegido-enchufado e$pecial ¿eh?
La meneo porque la meneo...pero que en las cárceles entra de "toito" todo de toda la vida
Con poner un inibidor de móviles de esos, y que valen la décima parte que uno de esos "sillones" arreglado...
#2 que pida autorización y llame por el de la garita de los vigilantes, que ser rico no le da derecho a nada jajajajajaaja