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El secreto de las comunicaciones lo garantiza la Constitución en su artículo 18. 3. Luego está el Código Penal; concretamente esto. Sospecho, sin embargo, que para evitar cosas como lo que el Avui le ha hecho a Daniel Sirera habrá que confiar en la deontología periodística. O sea, ja, ja, ja, ja.Yerra quien compara la jugada (difundir lo que capta un zoom dirigido a una pantalla de móvil) con las habituales indiscreciones ante un micro que se cree apagado.
A ver si vamos reconociendo lo que la sociedad catalana ya ha aceptado: el tripartito está más fuerte que nunca. Habrá que acostumbrarse a un govern que parece defender proyectos políticos dispares. Les mantienen adheridos dos decisiones: “evitar la fractura social” y esperar a que CiU se cueza en su propio caldo de altivez, jactancia y errores de cálculo. El mainstream es de Montilla. ¡Viva el aburrimiento!
El secreto de las comunicaciones lo garantiza la Constitución en su artículo 18. 3. Luego está el Código Penal; concretamente esto. Sospecho, sin embargo, que para evitar cosas como lo que el Avui le ha hecho a Daniel Sirera habrá que confiar en la deontología periodística. O sea, ja, ja, ja, ja.Yerra quien compara la jugada (difundir lo que capta un zoom dirigido a una pantalla de móvil) con las habituales indiscreciones ante un micro que se cree apagado.
A ver si vamos reconociendo lo que la sociedad catalana ya ha aceptado: el tripartito está más fuerte que nunca. Habrá que acostumbrarse a un govern que parece defender proyectos políticos dispares. Les mantienen adheridos dos decisiones: “evitar la fractura social” y esperar a que CiU se cueza en su propio caldo de altivez, jactancia y errores de cálculo. El mainstream es de Montilla. ¡Viva el aburrimiento!